En casa somos muy de cuchara, nos gustan los guisos, las sopas, los potajes y todo tipo de pucheros. Aparte de sabrosos, son fenomenales como plato único, puedes dejarlos hechos de un día para otro y en definitiva, son cómodos de hacer, sobre todo si te falta tiempo para cocinar. Así que en el futuro veréis unas cuantas entradas con este tema.
De momento, ya que el tiempo acompaña, empiezo con esta sencilla y sabrosa sopa.
Ingredientes (para cuatro personas):
- 250 gr de carne de morcillo, falda o restos de carne, para hacer caldo.
- 2 huesos de caña o rodilla.
- Una punta de jamón serrano (la prefiero al hueso pues el sabor es más suave)
- 2 zanahorias
- 2 patatas medianas
- 1 puerro grande
- 500 gr de calabaza
- Un buen puñado de perejil fresco.
- Sal y pimienta
Poner en agua fría todos los ingredientes, salar y cocer a fuego fuerte durante 10 minutos. Desespumar y limpiar con un cazo las impurezas del caldo. Después de hacer esto, cocer durante una hora a fuego lento. Colar el caldo. En un vaso batidor, triturar la calabaza cocida con el caldo...et voilá.
Buen provecho
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