miércoles, 1 de enero de 2014

Panecillos de mantequilla


Una de las cosas que más disfruto es hacer masas de pan. Hace unos meses no paraba de hacer panes, hasta que se me rompió la panificadora de tanto usarla. Eso, unido a que no es precisamente el pan el alimento más adecuado para comer alegremente, ha sido la causa de que dejara de prepararlos. Pero ya que es Navidad, vuelvo a las andadas y esta vez al modo tradicional, sin amasadora ni nada. ¡Y qué bueno queda!

Ingredientes:

  • 250 gr de harina de fuerza
  • 250 gr de harina normal
  • 25 gr de levadura de panadería
  • Una cucharadita de sal
  • 375 ml de leche entera tibia
  • 50 gr de mantequilla ablandada
  • Yema de huevo y leche para barnizar
  • Unas semillas de amapola

Preparación:
Deshacer la levadura en la leche tibia. Meclar la harina y la sal. Verter el líquido sobre la harina e incorporar la mantequilla ablandada. Colocarla sobre el mármol y amasar hasta conseguir una pasta firme, suave y brillante. Cubrirla con film trasparente y dejarla reposar hasta que doble su tamaño. 

Yo utilizo un truco para fermentar correctamente la masa que aprendí del maestro Francisco Tejero. Consiste en poner en horno a 50º, apagarlo y meter  la masa sin tapar para que fermente más rápidamente. Volverla a amasar y hacer bolitas que se colocan en un molde redondo para bizcocho. Cuando hayan aumentado de volumen, barnizar con yema de huevo y leche. Espolvorear con semillas de amapola y hornear a 200º durante treinta minutos (más o menos, dependiendo de las características de cada horno). 
Enfriar y servir.

Buen provecho



No hay comentarios:

Publicar un comentario