La dorada es un pescado blanco que tiene un sabor mariscado ya que se alimenta a base de crustáceos y moluscos. Se la reconoce por la mancha de color amarillo-dorado que tiene en la cabeza y su mejor momento está entre los meses de septiembre y octubre. Obviamente, todo esto se refiere a la dorada salvaje pues la que normalmente se encuentra en los mercados es de piscifactoría. Y la mancha amarilla-dorada de la cabeza es gris o negra en este caso. Su sabor tampoco es tan intenso pero resulta más asequible que aquella. Suele prepararse a la sal o con las mismas recetas que el besugo ya que pertenece a la misma familia.
Esta que he preparado va marcada con aceite de ajo y acompañada de salsa de mostaza antigua.
Ingredientes (para cuatro personas):
- 4 doradas de ración en filetes
- Un diente de ajo
- Una cucharada de mostaza antigua
- Una cucharada de mayonesa
- Una cucharada de yogur griego ligero
- Sal
- 3 cucharadas de aceite
Preparación:
Poner el diente de ajo en la sartén con el aceite. Apartarlo cuando se haya dorado. Marcar los filetes de pescado y salarlos. Reservar. Preparar la salsa batiendo la mostaza, la mayonesa y el yogur. Servir el pescado acompañado de la salsa y disfrutar.
Buen provecho
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