Natillas

Este es un clásico de los postres caseros que siempre es bien recibido cuando se presenta en la mesa. Las natillas tradicionales no tienen nada que ver con las que se venden en los supermercados. No son difíciles de hacer, ni llevan tanto tiempo de preparación como otros postres. Tan solo hay que tener cuidado de no hervir la leche para que la crema no se corte, y si esto ocurre, se deja reposar y se vuelve a ligar.
En casa nos gustan muy claritas, casi líquidas, pero si alguien las prefiere más espesas, solo tiene que rebajar la proporción de la leche o aumentar la cantidad de maicena y listo.
¡Ah! se me olvidaba, en la versión tradicional se sirven con una galleta espolvoreada de canela.

Ingredientes (para cuatro personas):

• 500 ml de leche entera
• 3 huevos
• La cáscara de un limón
• 125 gr de azúcar
• Una cucharada de maicena
• Canela

Preparación:
Separar las claras de las yemas. Poner la leche a calentar con dos cucharadas de azúcar y la cáscara del limón sin nada de piel blanca para que no amargue. Batir las yemas con el azúcar restante y la maicena. Añadir la leche caliente a esta mezcla, batirlo y ponerla a baño María sin dejar de mover hasta que espese. ¡Ojo! no debe hervir porque se corta. Si esto sucede, se deja reposar y se vuelve a batir. Cuando esté hecha, se sirve en un bol o en recipientes individuales.

Buen provecho.