Dice la sabiduría popular que este era el plato de las prostitutas, pues eso es precisamente lo que significa puttana aunque creo que no hace falta traducirlo para entenderlo. No se sabe muy bien si el plato era el anzuelo para “pescar clientes” o era una forma rápida de tener la comida lista antes de empezar “el trabajo”. No, no es un plato afrodisiaco, aunque sí es picante y hecho para disfrutar.
Es una receta muy sencilla que tiene la ventaja de poder dejar la salsa hecha con antelación. Lo que más sorprende de ella es que el sabor de las anchoas no se nota una vez hecha la salsa. Por eso, a los que no les guste este pescado pueden usarlo como indica la receta porque queda como un aliño.
Ingredientes (para cuatro personas):
- 400 gr de pasta
- 6 cucharadas de aceite de oliva
- 6 anchoas en aceite
- 2 dientes de ajo
- 400 gr de tomates enteros enlatados con su jugo
- Una pizca de azúcar
- Sal
- 20 aceitunas negras
- Una cucharada de orégano seco
- Una cucharada de alcaparras o pepinillos agridulces picados
Preparación:
Poner en una cazuela el aceite y calentar. Añadir las anchoas y moverlas hasta que se deshagan. Incorporar los dientes de ajo aplastados con una prensa y dorarlos. Añadir los tomates troceados con su jugo más el azúcar y el orégano. Cocinar hasta que los tomates queden hechos. Cocer la pasta en abundante agua salada. Cuando esté hecha, mezclarla con la salsa. Añadir las aceitunas picadas y las alcaparras o pepinillos. Servir la pasta en platos individuales con unas gotas del aceite de las anchoas.
Buen provecho
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