Mi suegra, como buena andaluza que es, tiene “duende” cocinando. Quiero decir que tiene arte para combinar ingredientes corrientes y darle a las recetas, por simples que sean, un toque peculiar.
Este es el caso de la ensalada que aquí presento. Mezclar judías verdes con tomate no es nada nuevo, pero en su forma de preparar el aliño es donde se esconde el duende.
Nos ofreció este plato un caluroso día del verano y fue todo un placer comer aquella ensalada tan fría y sabrosa, aunque servida tibia o caliente, no desmerece en absoluto. -“Abuela, ¿cómo lo has hecho? Huuuy... si es muy sencillo”-
Ingredientes (para cuatro personas):
- Un kg de judías verdes
- 2-3 tomates rojos, maduros y carnosos
- Una o dos cucharadas de vinagre de jerez (ajustarlo según el gusto)
- 3 dientes de ajo picados
- 3 - 4 cucharadas de aceite de oliva
- Azafrán
- Sal
Preparación:
Cocer los tomates enteros durante un par de minutos. Sacarlos, pelarlos y triturarlos o rallarlos. Reservar.
Cocer las judías peladas con sal. Cuando estén tiernas, escurrirlas y disponerlas en una ensaladera. Picar los ajos pelados y dorarlos en una sartén con el aceite. Apartar la sartén del fuego y agregar el azafrán. Añadir a las judías junto con el tomate reservado y el vinagre. Remover, rectificar el punto de sal si fuera preciso y enfriar hasta el momento de servir, o disfrutarlas a temperatura ambiente.
Buen provecho
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