martes, 15 de septiembre de 2015

Pollo alla cacciatora (a la cazadora)


El origen de esta receta parece que se encuentra en Toscana, el corazón de Italia y el lugar donde comenzó la cocina italiana. Cuando Roma no era más que un erial, la cultura etrusca estaba muy desarrollada y en ella el vino era parte importante. Por eso los italianos dicen que Toscana fue bautizada con vino. Siempre está presente tanto en los platos como en la mesa.
Las preparaciones “a la cazadora” consisten en aves o carnes cocinadas lentamente en una salsa a base de tomates y vino. Esa es su esencia, pero como a menudo sucede, los ingredientes son variables. Tengo varias recetas que así lo demuestran. En esta ocasión me he decidido por una versión de Jamie Oliver que he preparado en cazuela tradicional sin introducirla en el horno como él hace. Esa es la única diferencia entre su receta y la mía.


Ingredientes (para cuatro personas):

  • Un pollo grande troceado
  • 4 hojas de laurel
  • Una rama de romero fresco
  • 2 dientes de ajo
  • 250 ml de vino blanco
  • Harina para rebozar
  • Aceite
  • 3 filetes de anchoa
  • Unas aceitunas verdes o negras sin hueso
  • 250 gr de tomate al natural

Preparación:
Sazonar el pollo con sal y pimienta. Ponerlo en un cuenco para macerarlo, durante toda la noche o, en su defecto, un mínimo de dos horas con el laurel, el romero y un diente de ajo majado. Pasado el tiempo, escurrir el pollo y secarlo con papel de cocina. Enharinarlo y sacudir el exceso. Poner al fuego una cazuela resistente al horno y freír los trozos de pollo. Sacarlos y dorar en ese aceite el otro ajo picado; añadir las anchoas, las aceitunas y el tomate. Taparlo e introducirlo al horno durante una hora y cuarto. Retirar el exceso de aceite que quede en la superficie, así como el laurel y el romero. Acompañar de ensalada y servir.


Buen provecho

No hay comentarios:

Publicar un comentario