Recopilando recetas familiares me encontré con lo que la rama andaluza denomina “un pito”, es decir, una ensalada preparada a base de naranja y huevo duro. Ignoro el por qué de tal nombre.
En la zona comprendida entre las provincias de Córdoba, Málaga, Granada y Almería, son muy comunes las ensaladas a base de naranjas.
Parece ser que la receta original de la que derivan todas ellas consistía en naranjas aliñadas simplemente con aceite, unas veces aderezadas con sal y otras con azúcar. Con posterioridad, se fueron incorporando otros ingredientes porque como es usual, cada uno pone aquello que tiene más a mano o le gusta.
La receta que dejo aquí es de Granada y solía consumirse en invierno aunque a mí me parece más apropiada para la primavera. Imagino que debe ser por mi falta de costumbre o por ser de otro clima, en cualquier caso, es una ensalada deliciosa y colorida que una vez probada, seguro repetirás.
Ingredientes (para cuatro personas):
- 1/2 Kg de patatas nuevas
- 1/2 Kg de bacalao desalado
- 2 - 3 naranjas
- 1 cebolleta
- 2 - 3 huevos duros
- Unas aceitunas negras sin hueso
- Aceite de oliva
- Vinagre
- Sal
- Pimentón dulce
Preparación:
Cocer las patatas con su piel en agua salada. Pelarlas y cortarlas en rodajas. Asar el bacalao en el horno y cortarlo en tajaditas. Pelar las naranjas a lo vivo (sin la parte blanca) y cortarlas en rodajas o taquitos. Pelar los huevos y cortarlos. Trocear la cebolleta en aros finos. Preparar el aliño, exceptuando el pimentón y reservar. Montar el plato al modo tradicional o utilizar un aro de emplatar y alternar los ingredientes a capas. Aliñar y repartir el huevo y las aceitunas por encima. Retirar el aro, espolvorear con el pimentón y servir.
Buen provecho
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