Como suele suceder en Madrid por estas fechas, el calor ha llegado de golpe y mis ganas de meterme en la cocina desaparecen con la misma brusquedad. Cada vez soy más intolerante al calor y aunque es verdad que el apetito disminuye con él, no por eso dejamos de comer así que no hay más remedio que emplear la imaginación y preparar platos sencillos que se puedan quedar hechos a primera hora de la mañana.
El gazpacho, por ejemplo, no falta en la nevera y las ensaladas, ya sean de patatas, arroz o pasta, son el recurso perfecto para evitar el calor que produce cocinar. Mientras me adapto a la nueva estación, dejo aquí estas sabrosas patatas salteadas, rápidas de hacer.
Ingredientes (para cuatro personas):
- 800 - 900 gr de patatas nuevas
- 100 gr de beicon
- 100 gr de queso de cabra
- 8 tomates secos
- 50 - 100 gr de piñones
- 1 nuez de mantequilla
- 1 cucharada de aceite de oliva
- Sal y pimienta
- Unas gotas de zumo de limón
- 1/2 paquete de rúcula
Preparación:
Hidratar los tomates secos en un vaso con un poco de agua caliente. Reservar. Cocer las patatas lavadas con su piel en una cazuela con agua salada. Después de escurridas, cortarlas en rodajas y saltearlas con cuidado en una sartén con la mantequilla, evitando que se rompan. Colocarlas en una fuente. Saltear los taquitos de beicon y disponerlos sobre las patatas. Cortar el queso en pedacitos y añadirlo también. Tostar los piñones en una sartén sin aceite hasta que se doren. Ponerlos por encima de las patatas junto con los tomates cortados en tiras. Añadir por último la rúcula con un poco de limón y sal, rociar el conjunto con un hilillo de aceite, y listas para servir.
Buen provecho
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